¿QUÉ HACE QUE A LAS PERSONAS LES VAYA MEJOR EN LA VIDA?: UNA TEORÍA ALTERNATIVA SOBRE LA FELICIDAD
Esta pregunta “¿Qué es lo que hace que a algunas personas les vaya mejor en la vida?”, es una de las preguntas fundacionales que se realiza la Psicología Positiva. Su fundador, Martin Seligman, presentó a finales de los 90’ la Psicología Positiva como una nueva rama de la psicología que en lugar de centrarse en lo que “no funciona”, en lo patológico o “desviado” de la norma, se centró en lo que hace que las personas evolucionen y se desarrollen por encima de la media, lo que hace que les vaya mejor o sobresalgan por encima de la media. Como de dice Seligman “pasamos de trabajar en la Zona Roja a trabajar en la Zona Verde”.
Y ¿Qué es lo que hace que a las personas les vaya mejor en la vida?. A nivel psicológico hay varias evidencias de cuales son los factores que hacen que las personas tengan vidas más satisfactorias y mas felices, pero en este artículo quiero abordar un planteamiento como mínimo curioso sobre la Felicidad: la Felicidad como precursora del Éxito.
La verdad es que yo, personal y profesionalmente, estoy un poco saturado del uso indiscriminado y cansino que se ha hecho sobre el concepto de la Felicidad. Por eso quiero arrojar un poco de luz sobre este concepto, y quiero abrir con un planteamiento, como he dicho “curioso”: la Felicidad no es un resultado, es una condición previa al éxito en la vida.
Me explico. La Felicidad no es el resultado del éxito, si no al contrario. Este planteamiento es el que han hecho psicólogos como M.Seligman, S.Achor, B.Fredrickson, y Ben-Shahar entre otros que llevan mucho tiempo investigando la felicidad de forma seria y empírica. Su tesis es que nos han “vendido” que seremos felices cuando consigamos algo, cuando alcancemos algo, cuando seamos algo, cuando lleguemos a algo … un empleo, una carrera, una casa, un hijo, un coche, unas vacaciones, un novio … “Cuando consiga esto, seré feliz.””Cuando logre tal cosa estaré tranquilo y me sentiré satisfecho.” Pero todos sabemos que esto no es así. Conseguimos trabajos, hacemos viajes, compramos cosas, encontramos pareja, terminamos estudios, cambiamos de casa … y somos felices un rato, si, pero después se nos pasa y volvemos al estado de “felicidad inicial”. Ponte la meta que quieras, haz el viaje que quieras, o múdate a vivir a la casa de tus sueños … eso no te hará feliz para siempre. Un rato si, pero no para siempre. La felicidad es algo fugaz, fatuo y resbaladizo.
Dejadme que os cuente algo al respecto: tu cerebro está muy bien preparado para sobrevivir, pero muy mal diseñado para que seas feliz. Evolutivamente nuestro cerebro se ha especializado en buscar peligros, buscar lo que está mal, lo que no funciona, lo que no nos gusta o lo que puede ser amenazador (cuantas noches sin dormir pensando en apocalipsis y desgracias del futuro que después no ocurren).
Mark Twain decia: “Soy un hombre muy viejo que ha sufrido muchos infortunios, la mayoría de los cuales jamas han sucedido.” Esta frase ilustra el destino del ser humano, o mejor dicho el destino del cerebro humano, a amargarse la vida con tal de prevenir todos los peligros que puedan poner en peligro al organismo. De ahí viene el dicho … “Piensa mal, y acertarás.” Estamos programados para funcionar así, fijándonos mas en lo negativo que en lo positivo. Pero dejadme que os de una buena noticia: estamos programados pero no condenados. Y menos lo vais a estar cuando escuchéis 2 cosas que os tengo que contar:
- Tu felicidad depende de las historias que te cuentas
- La Felicidad es precursora y predictora del éxito. Cuanto mas feliz seas mejor te irá en la vida
Empecemos por el segundo punto.
La Felicidad es precursora y predictora del éxito. Es decir, a las personas que, de entrada tienen mas emociones positivas durante el día les va mejor en la vida. ¿Ah, si?¿Porqué?
Pues por 2 razones:
- Tu cerebro funciona mejor cuando está contento.
- La gente prefiere a las personas que están contentas.
Un cerebro feliz es mucho mas efectivo, mucho mas ágil, mucho más abierto a alternativas, mucho más creativo, retiene mayor la información, aprende más rápido que un cerebro enfadado o en negativo. Es decir, la felicidad le saca el mejor rendimiento cognitivo al cerebro. ¿Crees que exagero? Haz algo tan sencillo como auto-observarte en un día en el que estás de pésimo humor. Cuando estás de pésimo humor ¿Funcionas mejor?, ¿Eres mas efectivo?, ¿Arreglas las cosas con mas soltura? … o por el contrario tu nivel de atención disminuye, te enredas en pensamientos negativos con mas facilidad y te olvidas las cosa? Creo que la respuesta es obvia. No puedes ser creativo, ocurrente, efectivo y conciliador cuando tu cerebro está en modo “alarma-peligro”, o en modo “agobio-frustración”. Algunas emociones
negativas como la frustración, la envidia, la rabia, la angustia y la apatía, reducen tus capacidades cognitivas. Algunas emociones negativas, en exceso, nos vuelven directamente imbéciles de remate.
En cambio las personas, cuando estamos de buen humor, cuando sonreímos al mundo, cuando sentimos emociones positivas, nuestro cerebro nos brinda el mejor de sus potenciales, y es cuando podemos ser brillantes, ocurrentes, divertidos y conciliadores. Por eso la felicidad es precursora del éxito, porque nos permite poner en marcha las mejores cualidades y prestaciones de nuestro cerebro. Parece lógico, pero cuantas personas siguen esperando a que ocurra algo o conseguir algo para ser felices. No es así, se feliz, siéntete bien, y eso te dará mas oportunidades de tener éxito en la vida y tus proyectos.
Y quizás algunos piensen: “Vale muy bien, ¿pero como lo hago para ser feliz?.”
Lejos de pensar que ser feliz o sentirse bien es algo fácil, tengo la certeza por mi experiencia profesional y personal, que ser feliz a muchas personas les resulta tremendamente complicado en algunos momentos o etapas de su vida. Si, es verdad, muchas veces ser feliz no es fácil. Pero déjame que te haga una pregunta: ¿Cuando fue la última vez que tuviste un enfado, una angustia, un cabreo o un momento de estrés que te hizo sufrir? ¿Está mañana mismo?, ¿ayer por la tarde?, ¿hacer un rato? Yo mismo he tenido un mal momento hace un par de horas al ver todo el trabajo que tengo acumulado y que tengo que terminar antes del fin de semana, y la verdad, me he agobiado. Pero ahora pregúntate ¿de verdad era para tanto? ¿de verdad era tan importante? ¿tan injusto? ¿tan fatal? … la mayoría de las veces ni es tan importante, ni tan injusto, ni tan fatal, ni tan urgente, ni tan nada de nada. Algunas veces si, pero la mayoría no.
Y esto es así porque, como he dicho antes, nuestro cerebro está programado para fijarse en lo negativo, y se altera con una facilidad pasmosa delante de las “historias que nos contamos” sobre lo que sucede en el mundo y lo que nos sucede en el día a día.
Y aquí viene el segundo punto de la narración: Tu felicidad depende de las historias que te cuentas. Si te cuentas que es malo, así lo sentirá tu cerebro. Si te cuentas que es indignante, así lo vivirá tu cerebro. Si te cuentas que todo es una mierda, tu cerebro va y se lo cree. Y todos nos contamos historias que condiciona nuestras emociones y nuestro estado interno, la gracia está en ser conscientes y escoger con cuidado esas historias que nos contamos. Escoge las historias que te cuentas, escoge la versión del mundo que te cuentas porque esto va a condicionar tu bienestar y tu salud emocional. No estoy diciendo que nos engañemos, estoy diciendo que tengamos cuidado con lo que le damos de “comer” a nuestro cerebro, porque las salud del cerebro depende de los pensamientos que le des de comer a diario.
Os propongo un pequeño ejercicio:
- Dime 3 cosas buenas, agradables, divertidas o bonitas que te hayan pasado los últimos 3 días.
- Ahora cuéntame una cosa que es una realidad ahora en tu vida, que está pasando en tu vida, o que has conseguido y de la cual estás agradecido/a.
Hazlo y después dime como te sientes. Y no seas cínico, hazlo de verdad, y luego observa como te sientes.
Seguramente sonreirás un poco, y créeme, los demás te prefieren cuando sonríes, y eso, que los demás te prefieran y se sientan bien contigo, también es una billete al éxito en la vida.
Un abrazo a todos/as y hasta la próxima.
Muchas gracias, como siempre. Me encantó. Y sí. Sonreí al final del ejercicio.